HOY les traemos el capítulo 65 de "Una Nueva Vida", la novela de nuestro FansClub Oficial e Internacional de Pablochi "Pablochifans".
En el capítulo de hoy, todos están con miedo, nerviosos, pero al mismo tiempo ansiosos por la vuelta a casa. Los chicos se despiden de sus amigos del futuro y les desean lo mejor en sus vidas. Tic Tac los prepara, el reloj comienza a vibrar y una luz proveniente del mecanismo de éste los envuelve por completo. ¿Con qué se encontrarán en el 2011?
"Los finales son posibilidades de nuevos comienzos. Las despedidas son promesas de reencuentros".
No se pierdan este capítulo emocionante y por supuesto decisivo, uno de los últimos. Esperamos que les guste y que nos dejen su opinión en un comentario.CLICK EN LEER MÁS PARA LEER EL 65º CAPÍTULO
CAPÍTULO 65: Vuelvo a Casa
Eran las 5:30am y Simón y yo ya estábamos levantados, cambiados y con las mochilas sobre nuestros hombros. Salimos al pasillo donde estaban todos, coronados por un igual rostro lleno de tensión y preocupación con una chispa de ansia, por lo menos en mi caso.
- ¿Qué momento no? – dijo Jazmín para romper el hielo, ya que todos nos mirábamos cayados.
- No puedo creer que estemos a tan pocos minutos – agregó Melody, tratando de que Amado no despertara.
- A mí no me sorprende. Pasé del 2048 al 2030 y ahora al 2011. Igual, no niego que un poco de nervios tengo – Dijo Kika cuando salió del cuarto y se nos incorporó, mientras intentaba que la mochila le cerrara, ya que llevaba muchas cosas. Ese comentario hizo que algunos soltaran una risita, pero no era momento para chistes.
Todos, a la velocidad de un pingüino ya que todos estaban con cierto grado de miedo, fuimos al comedor para desayunar aunque sea lo más mínimo ya que el viaje de tiempo te abre el apetito. Lo sabíamos por experiencia propia y por consejo de Paz.
Algunos no comieron, otros se devoraron todo por angustia y otros por ansiedad. Me incluyo en el último grupo. Durante el desayuno sólo se cruzaron una ínfima cantidad de palabras. Predominaban las expresiones en las caras, los gestos y las emociones propias.
Unos pocos minutos, finalizado el desayuno, el reloj de Nacho comenzó a sonar, indicando que eran las 6am en punto. Al oír ese sonido, el corazón se nos paralizó a todos. Cuando dejó de sonar, miradas cómplices llenas de pánico e incertidumbre se adueñaron del lugar, y al instante llegaron Paz y Hope, haciendo que todos nos paráramos inmediatamente provocando un estruendoso ruido hecho con las sillas.
- ¡Ay! ¡No lo puedo creer! ¡Se me van! – decía Esperanza mientras se limpiaba las lágrimas con un pañuelo descartable, procurando que no se le corra el maquillaje. - ¡Se me van mis tíos con espíritu joven! ¡Ahora me voy a tener que conformar con los viejos y deprimidos!
- No les digas así, siguen siendo ellos pero más grandes – la reprimió Paz
- Maga, una vez que llegue al pasado, si encontrás acá al Teo baqueteado, tratá de que no siga empeorando – le pidió Teo, haciendo un chiste pero con tono de verdad.
- Quedáte tranquilo, están y van a estar todos hermosos y llenos de vida como ahora – le prometió. – Bueno chicos, llegó la hora, síganme – y Paz avanzó hasta la puerta, seguida de Hope. Nadie de nosotros quería ir primero.
- ¿Se van a quedar ahí? – preguntó Hope al ver que no las seguíamos – Por mí no hay problema – dijo feliz, pero Thiago avanzó de la mano con Mar y luego todos los seguimos.
El sol del reciente amanecer nos cegó por completo cuando la muchacha de rastas abrió la puerta de par en par. Todos la cruzamos con cierta nostalgia, pensando que sería la última vez que estaríamos en ese hermoso lugar, por lo menos en el futuro, que tantos buenos recuerdos nos dejó.
Cerca de la mandala del observatorio (que fue puesta otra vez hace unos días) se encontraban nuestros amigos del futuro, amigos que ya no volveríamos a ver en nuestro pasado por mucho tiempo. Estaban el profe, Kant, Renné, Luz, y Jhonny, quien tenía a Mina con la correa, lista para ser tomada por Rama.
Paz y Hope se pusieron con ellos, dejándonos a los “viajeros” de un lado.
- Chicos, llegó el momento de despedirse. Sepan que no es un adiós, sino un “hasta luego” – nos dijo Paz con su voz angelical que tanto la caracterizaba.
- Los finales son posibilidades de nuevos comienzos… - dijo el profe, que llevaba un muy bonito chaleco bordó.
- …Las despedidas son promesas de reencuentros – completó la frase Paz, brindándonos como broche de oro una sonrisa angelical.
Nos abalanzamos sobre nuestros amigos para despedirnos de ellos como se debía. Fueron una parte fundamental de nuestra misión, sin ellos no estaríamos volviendo a casa. Siempre van a estar en nuestros corazones, y los recordaremos por lo que son y por lo que serán cuando los veamos en el pasado.
La última que saludamos Simón & Yo fue a Paz, y no fue por casualidad. La abrazamos por unos cuantos segundos y luego la miramos a los ojos con toda la seguridad del mundo.
- Paz, prometénos que vas a cuidar a Joaquín, a Nina y a Kiara, que van a estar bien – le pidió Simón de parte de los dos.
- No necesitan que yo los cuide, tienen los mejores padres que alguien pudiese tener. Aunque sí, los voy a tener vigilados – nos dijo chistosa y luego la volvimos a abrazar. Que una persona como Paz nos halague de esa manera, era algo asombroso.
Jhonny le dio la perra a Rama y luego el profe nos ordenó que nos paremos todos sobre la mandala, agarrados de las manos. Y eso hicimos. Los que no iban a viajar se alejaron unos cuantos metros.
- Antes que se vallan, dos cosas tengo para decir – comenzó a decir Paz. Por un lado quería que siguiera hablando, pero por otro quería que se callara, quería viajar ya, y creo que muchos deseaban lo mismo – Primero: Mar, Thiago, felicitaciones, y cuídenlo mucho.
- ¿Eh? – preguntó Mar, con una expresión en la cara muy graciosa.
- ¿Paz, de qué hablás? – insistió Thiago.
- Ya se van a enterar – les dijo con una tierna sonrisa que los calló por completo. – Segundo, el que los va a hacer viajar los quiere saludar.
- ¡Hey! ¡Hola! ¡Acá! Che, ¡qué pálidos que están! ¿Tanto miedo tienen? ¡Se van a estrujar las manos entre sí!– bromeó Tic Tac desde la ventana del altillo, la más próxima al reloj. - ¿ESTÁN LISTOS? – preguntó, y luego todos asentimos, contentos. Era lindo verlo a aquel hombre de blanco en ese momento, aunque sabíamos que lo seguiríamos viendo en la otra línea temporal.
Todo empezó a temblar y todos nos agarramos de las manos aún más fuerte. Lo último que vi fue a nuestros amigos del futuro saludándonos, agitando las manos a escasos metros. Posteriormente, un resplandor blanco nos cegó por completo hasta hacernos cerrar los ojos.
Durante unos pocos segundos no los pude abrir, pero cuando lo logré, no podía creer lo que estaba viendo. Mirábamos a nuestros alrededores y nos mirábamos entre nosotros absortos, sorprendidos, pero sin soltarnos las manos.
Obreros y arquitectos estaban a nuestro alrededor, por lo que parecía, transformando el “Hogar Mágico” en el “Mandalay”. Ninguno se percató de nuestra llegada, parecía que siempre hubiésemos estado ahí. Aunque en realidad sí, estábamos parados sobre la mandala, que todavía no había sido pintada.
De pronto, la puerta del bar “TeenAngels” (porque todavía no habían sacado el cartel) se abrió, y un hombre de sombrero al estilo de Indiana Jones apareció.
- ¡Hola familia! – nos gritó Nico, abriéndonos los brazos. Comenzamos una carrera para ver quién llegaba más rápido a él al igual que la última vez que lo abrazamos aquel diciembre de 2008, antes de que a las 21:04pm, la fuente nos llevara al futuro, del cual acabábamos de regresar con nuestra misión cumplida.
3 Pablochis comentaron:
muy bueno, me encantó el capítulo de hoy ... pena que la novela ya está terminado:(
gracias por poner el capítulo de hoy. ;)
me encanto el cap, una lastima que se termine :( me gusto mucho de verdad♥ espero ansiosa el otro
me encanto.. ves asi tenia que ser el final de CA --- tenias q escribir vos la novela no calderone jajaja
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