Esperamos que lo disfruten y que pasen un buen momento.
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CAPÍTULO 19: Más salvajes
Estuve 20 minutos encerrada en una burbuja fabricada por mi miedo, mi angustia y mi desorientación sobre lo que estaba pasando, hasta que llegó Mar para romperla.
- ¿Vale qué te pasa? – abrió los ojos como platos y no dejaba de mirarme. Se acercó a mí.
- Me estuvo por lastimar un salvaje, ¡Y encima mi mejor amigo me oculta cosas! ¿Podés creer? – comencé a llorar de nuevo y ella me abrazó. Luego se separó como un rayo.
- ¿Salvaje dijiste? ¿Qué salvaje? ¿Era varón?
- Mar, era una chica, y no sé, como que me pongo a pensar y su intención no era lastimarme. Ella quería como que yo reaccionara, ella me conocía, y yo sentía que la conocía, pero no. – mis lágrimas se detuvieron.
- ¿Y estás bien vos? Hace un par de minutos tenías una cara de velorio terrible. – logró sacarme una sonrisa. – Dale Vale ponéte bien, si estuviéramos que estar así por cada ataque de salvajes, tendríamos que estar todos con chalecos de fuerza como los locos – esta vez hizo que una sonrisita saliera desde mi más profundo interior.
- Tenés razón, ¿Y vos por qué tan defensora de los salvajes?
- Ah, nada, porque tengo una relación clandestina con uno, por eso – miré el suelo y cuando me di cuenta de lo que había dicho, la miré sorprendida.
- ¿Vos te sentís bien Mar? – por un momento la traté de loca.
- Me parece que vos sos la que estás mal, ¿qué tenés un problema en los oídos que no escuchaste lo que te dije?
- Sí, escuché, pero Mar, te acabo de decir que pasé un mal momento con un salvaje y vos me venís a decir que estás saliendo con uno. Definitivamente me estás tomando el pelo y te estás poniendo en peligro, es lo único que te digo.
- Pero este es distinto, y me está demostrando que ellos no son malos, por lo menos su grupo, y que solo quieren…- hizo una pausa - …que todo se llene de amor.
- ¿Cómo se llama? – Ya no sabía qué preguntarle, me ponía muy incómoda éste tema. No quería ser cómplice si algo de esto salía mal.
- Thiago – me dijo cortante.
- ¿Thiago? ¿No es el que…? – me interrumpió.
- Si, ya sé, pero cada vez me estoy convenciendo más de que no fue él.
- No puedo seguir tus pensamientos y tus deseos Mar, perdonáme.
- Está bien, no importa. Bueno, me voy a verlo, deseáme suerte.
- Deseo que no te mate – nos reímos y ella se fue, cerrando muy despacio la puerta.
Necesitaba un poco de aire después de tanto estrés, así que salí de la habitación y me dirigí hacía el patio del NE. En el trayecto, me puse a repasar todo lo que viví y lo que me contó Mar. ¿Estaba bien lo que estábamos haciendo? ¿Estaba bien involucrarse con lo salvajes? ¿Realmente serían asesinos locos como nos decían? ¿O sólo querían que los aceptáramos? Bueno, yo no me involucraba con ellos, ellos venían a mí. ¿Y la charla secreta de Ramiro, Hope y Arthur? Luego me ocuparía de eso, encararía a alguno de los tres después, sobre todo a mi mejor amigo.
Caminé por los exteriores del NE y paré repentinamente debido a una escena que mis ojos estaban presenciando. Desde la ventana de la puerta del bar, podía ver a Ramiro, estaba a los besos con una chica, ella estaba sentada en una mesa, con los pies colgando. Luego Ramiro vino hacia la puerta, yo me escondí tras la pared y él cerró la cortina de aquella pequeña ventana por la que estaba viendo. Me asomé otra vez, y aunque ahora tenía una franja de
Ahora que Ramiro no la tapaba, podía verle el rostro a su chica. Era una muchacha flaca, mas o menos de la estatura del rubio, con pelo lacio morocho, anteojos, y con una sonrisa muy dulce. Se veía tan chiquitita que parecía una nenita.
En un momento me concentré tanto en cómo expresaban su amor, que no me di cuenta que me acercaba cada vez más al vidrio. Por supuesto, mi frente chocó contra él, provocando un ruido seco. Me volví a esconder detrás de la pared. A los pocos segundos, Ramiro salió y cerró de un portazo la puerta. Se volteó y me miró sorprendido.
- Valeria, ¿Qué hacés acá?
- Lo mismo te pregunto yo. Vení, necesito que me aclares un par de cosas.
Nos sentamos en unas de las mesitas de afuera del bar.
- ¿Qué pasa Vale?
- Ramiro, necesito explicaciones urgentemente porque sino mi cabeza va a explotar, enserio te lo digo.
- Bueno, entonces decíme qué te pasa a ver si yo te puedo ayudar.
- ¡Obvio que me podés ayudar! Punto uno: ¿Por qué fueron a hablar muy en secreto vos, Hope y Arthur? ¿Y por qué decían esas incoherencias? ¡Esas cosas son imposibles!
- ¿Nos escuchaste?
- ¿Es obvio no? Si no, no te estuviera preguntando. Igual no escuché todo, pero lo poco que escuché, me pareció una locura. Y no quiero que prendan a mi mejor amigo en sus cosas raras, andá a saber, ¿con salvajes? – él miró para otro lado y se puso nervioso.
- Él se metió sólo, además no te podemos contar, es algo entre nosotros tres, muy, muy secreto, casi confidencial, y no te lo podemos contar porque no nos creerías. Tenes que vivirlo para creerlo.
- ¿Qué es ese secreto tan misterioso Ramiro? Arthur nunca me oculta nada, y te juro que esto tampoco.
- No te lo puedo decir, pero a ver, Vale, ¿Por qué pensás que Arthur es tu mejor amigo incondicional¿ ¿Acaso lo conocés de toda la vida? – me dedicó una sonrisa como de curiosidad.
- Obvio, desde chiquito. ¿Qué pregunta es esa?
- ¿Estás segura? ¿No hay cosas con él que no te cierran? – lo miré enojada, disgustada y sin entender nada. Él lo notó y cambió de tema - ¿Y la otra cosa con la que querés seguir interrogándome?
- ¿Quién era esa chica del bar? ¿Era tu novia?
- ¡Ah, eras vos! Sí, ¿sabés qué?, es mi novia, y es salvaje, por si te interesa saber. – casi se me cae la boca de la sorpresa.
- ¿Qué está de moda tener relaciones clandestinas con salvajes? – no pude evitar decirlo, me salió del alma.
- ¿Lo decís por Mar? – Ahora sí mi boca se me cayó, pero luego comprendí. Seguro el salvaje de Mar le contó a la salvaje de Ramiro y ésta se lo contó a él.
- ¿Bueno sabés qué? Yo mejor me voy, porque no quiero seguir enterándome de más relaciones clandestinas con salvajes y ser cómpli… - Ramiro me tapó la boca como pudo. Había levantado mi vos y no me di cuenta.
- ¿Te podés callar? Se supone que es secreto ¿no? – me sacó la mano de la boca.
- Como te decía, me voy a buscar a Arti, para que me de más explicaciones de ese secretito tan confidencial que tienen.- me paré y cuando me estaba yendo Ramiro me gritó:
- ¡No te va a decir otra cosa diferente a la que yo te dije Valeria! – no quise darme vuelta para mirarlo.
Ya se estaba haciendo de noche y los festejos por la fiesta medieval seguían. A las 9 se hacían las presentaciones de las parejas en el baile, en un rato me prepararía, pero antes tenía que hablar con mi mejor amigo.
Necesitaba muchas explicaciones. ¿Por qué todos están de novios con salvajes? ¿Por qué Ramiro me hizo durar sobre mi amistad con Arthur? ¿Eso tenía algo que ver con el secreto que me escondían? ¿Estuve en coma o algo así y había algo de lo que me perdí?
No sé, lo único que quería en ese momento era en dejar de pensar en salvajes y dedicarme a hablar con Arti, mi mente necesitaba soluciones rápidas contra sus problemas de entendimiento.
1 Pablochis comentaron:
Vale ya empieza a ver lo que pasa! :D
Qué ganas de que se enteren de todo
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