"Una Nueva Vida" CAP 52: "Todo cambió"

miércoles, 23 de febrero de 2011 6 Pablochis comentaron
HOY les traemos el capítulo 52 de "Una Nueva Vida", la novela de nuestro FansClub Oficial e Internacional de Pablochi "Pablochifans".
En el capítulo de hoy, hablado por Simón, él y Tefi tienen el primer encuentro con Luca y Vale luego de lo sucedido. Todo es tensión, furia, desconcierto y angustia. Luca y Vale están desentendidos del tema, cosa que sus parejas no soportan y esto los hace estayar. Kant se lleva a los recientemente secuestrados para examinarlos. Simón y Thiago reflexionan en el búnker, él cree que les lavaron nuevamente el cerebro. Thiago le promete a su hermano del alma una solución a todo este problema.
Esperamos que les guste y que nos dejen su opinión en un comentario.

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CAPÍTULO 52: Todo Cambió [Habla Simón]


Esa escena me había petrificado por completo, a tal punto que no me importaba que el “sin nombre” me estuviese tomando de la mano. Sin embargo, de un instante al otro, ya no se encontraba a mi lado, una enfermera se lo había llevado.
- ¡Negri! ¡Negri! – escuché que Tefi gritaba desde lejos por detrás de mí mientras se acercaba corriendo. Cuando me pasó unos pocos centímetros, casi instintivamente, la tomé bruscamente del brazo y la traje hasta mí de un tirón.
- ¡Ay! – Exclamó ni bien la tiré con fuerza - ¿Simón que te pasa? ¡Está mi Negri allá! ¡Y volvió Vale! – Al ver el estado de mi rostro angustiado, su expresión de felicidad cambió por una de desconcierto. - ¿Saimon estás bien?
Sin decir ni una palabra, y con las lágrimas tocando mis labios, quité mi mirada de sus ojos y la dirigí hacia donde estaban ellos, indicándole que eso era todo lo que tenía que ver. Aunque una gran felicidad la dominó otra vez, al ver aquello, se volvió a desdibujar nuevamente su sonrisa, convirtiendo su expresión en una totalmente horrorizada, que la incitaba a llorar por más de no tener siquiera una explicación al respecto.
- ¿Qué es esto? – dijo en un tono muy frío, mientras se refregaba los ojos para estar segura de que no era un sueño y de que aquellos besos sólo eran una mala jugada de su imaginación.
Un calor comenzó a subir desde mi cintura, pasando por mi espalda hasta llegar a mi cuello. Mi expresión cambió totalmente a la de un toro enfurecido, que al mismo tiempo derrochaba lágrimas, ya no de tristeza, sino de bronca. Aquel fuego interno coloreó mi rostro de un rosa intenso, sentía que lo peor de mi se estaba desatando. Los intentos de contener esa furia eran en vano, no bastaba sólo con apretar puños y dientes.
- Simón, recapacitá. Tiene que haber una explicación razonable para todo esto, creéme, la tiene que haber, con la violencia no ganas nada. – me dijo Thiago que se encontraba a poca distancia de Tefi y de mí, sabiendo, al conocerme como un hermano, que mi estado no era el más sereno.
- No sé si la hay Thiago, pero si él no lo hace lo voy a hacer yo – agregó Tefi, que hasta el momento se hallaba totalmente en silencio. Era una Tefi en llamas que no había visto casi nunca.
No aguanté más. Solté la mano de Tefi y empecé a correr cual “corre caminos” en dirección a la ambulancia. Ni bien hice un mínimo movimiento, Thiago ya se hallaba detrás de mí con la intención de pararme para que no ocurriera una masacre. Los dos dejaron de tener “contacto” cuando me vieron corriendo a toda velocidad hacia ellos. Sin parar una centésima de segundo, salté al interior de la camioneta para abalanzarme sobre Luca, pero desgraciadamente Thiago tomó mi tobillo derecho mientras estaba en el aire y caí al piso del vehículo con la cara de manera similar a la que cae una bolsa de cemento. Evitando el dolor que eso me había producido, me incorporé inmediatamente, aunque Thiago me tomaba por el torso, impidiendo que pudiese lastimar a alguien.
- ¡Explíquenme qué mierda es lo que están haciendo! – les dije furioso, sin ocultar mis lágrimas que salían como baldazos, forcejeando para que Thiago me deje suelto y pueda surtir a Luca de una paliza.
- Pará hermano, ¿Qué te pasa? – me dijo Luca, Vale se hallaba asustada, aferrada al brazo de él, pero todavía sentada en la camilla.
- ¡¿Hermano me decís?! ¡¿Hermano?! ¡Eras mi mejor amigo y de la nada llegan y te encuentro besando a mi novia! ¡¿Eso te parece un hermano?! ¡Basura! – le dije ya perdiendo la cabeza, con mi rostro empapado de lágrimas.
- ¿Qué? ¿Vos te escuchás cuando hablás? ¡Estás diciendo cosas sin sentido! – dijo el “negri”
- Además, yo nunca estuve ni estaría con vos, Simón. Y lo sabés muy bien. No encuentro la razón de tu enojo. – agregó Valeria, aferrada cada vez más fuerte al brazo de Luca.
- ¡¿Me estás cargando Valeria? Si nunca estuviste conmigo, ¡¿Entonces qué carajo es esto que tenemos en el dedo? – le dije mostrándole mi mano en donde se encontraba el anillo de casamiento. Ella miró la suya y abrió los ojos bien grandes.
- No sé qué es esto – respondió con total frialdad.
- Simón, nos están tomando el pelo estas dos mierdas. – dijo Tefi por detrás de mí, uniéndose a la conversación. Me empujó y se acercó a centímetros de su “Negri”.  – Después de todo lo que luchamos por estar juntos, ¿Me hacés esto? ¿Me engañas con una de mis amigas, con la esposa de tu mejor amigo? Sos de lo peor Luca Franccini – dijo, para luego dejarle los dedos marcados tras una cachetada bien colocada. Vale y Luca se quedaron pasmados ante aquel acto, mientras Thiago, sin soltarme, alejaba a Tefi y la traía con él.
- ¡Kant! ¡Renné! – los llamó Thiago y llegaron al instante, ya que se encontraban muy cerca. – Llévenselos y háganles los estudios correspondientes. Kant, también hacéles “esos” estudios, estoy casi seguro que todo este embrollo viene por ese lado.
Kant y Renné se los llevaron inmediatamente. Los tres bajamos de la ambulancia, y una vez que Tefi y yo estuvimos calmados, Thiago nos soltó. Melody llegó al instante, y como era de esperarse, Tefi se fue con ella, su única contención por el momento.
- Vení conmigo, y no te me escapes – me ordenó Thiago.
Fuimos con mucha prisa durante todo el camino, él me explicó que era para que no vieran mi estado deplorable. Llegamos al búnker subterráneo.
- Sentáte ahí – me ordenó señalando un puff, mientras cerraba la puerta. Hice lo que me pidió y luego él tomó otro y se sentó frente a mí. – Dale, llorá, terminá de descargarte, mejor que lo hagas conmigo que con todos.
 - No quiero llorar más, sólo quiero despertar de esta pesadilla, yo sé que todavía estoy durmiendo en mi cama y que en algún momento me voy a despertar y todo va a ser normal.
- No, hermano, esto, todo esto es la realidad, cambiada, todo cambió, pero realidad al fin. – me dijo mientras me secaba las últimas lágrimas con su pulgar. – Yo te dije que alguna explicación tenía que haber, y espero que sea como pienso.
- ¿Qué pensás?
- Que les intervinieron el cerebro, la típica arma letal de ellos, estoy muy seguro. Kant ahora los está examinando, y si es eso, lo único que hay que hacer es encontrar la cura, o que recuerden como todos lo vienen haciendo, y así todo va a volver a ser justo como era antes, te lo prometo.
- No prometas cosas que no sabés si vas a poder cumplir.
- Te lo prometo, y cuando yo prometo algo, lo cumplo aunque tenga que hacer hasta lo más extremo, y lo sabés muy bien Simón. – Yo sabía que sí, pero estas circunstancias me hacían dudar, y mucho.
Thiago se levantó y hurgó en la caja donde estaban todas sus pertenencias, sacó algo, y al instante ya lo tenía otra vez sentado en el puff, justo en frente de mí.
- ¿Sabés como se comen no? – me dijo ofreciéndome una “Oreo” de las que a él tanto le gustaban, convenciéndome con esa “sonrisita compradora” de la que Mar tanto hablaba. Le correspondí la sonrisa y tomé la galleta.
- Gracias, por esto y por todo, siempre estás ahí cuando más te necesito sin que te lo pida, y siempre me hacés sentir bien después de cosas tan terribles como lo que pasó recién.
- No me tenés que agradecer nada, de eso se trata, somos hermanos, y así es como tiene que ser, el uno para el otro. – me dijo con toda la paz del mundo, una actitud envidiable, y culminamos la situación con lo que más necesitaba en ese momento: un abrazo de mi hermano del alma.

6 Pablochis comentaron:

  • Camy110 dijo...

    Thimón (L) Me encanta jajaja
    Pero quiero ya que los otros dos dejen de tener el cerebro todo mareado jajaja Me dan una pena Simón y Teffy :(

  • Leticia dijo...

    Muy bueno, me encanta a pablochi, y me gusta la novela , cuando subes el proximo cap ? Brazil ...